domingo, 19 de mayo de 2013

¡Cuidado con estos diez alimentos!, parecen inofensivos pero te envejecen

Algunos van deteriorando nuestro organismo poco a poco, mientras otros producen enfermedades, que a la larga nos hacen lucir cansados y de mayor edad. Son ricos y muchos parecen sumamente sanos, pero algunos de sus ingredientes pueden provocar daños en nuestro organismo, haciéndonos lucir cansados y de mayor edad.


El portal De10.mx recopiló una lista con los alimentos que, aunque parecen inofensivos, nos causan algunas enfermedades que nos hacen envejecer.

Comida congelada. Nadie puede negar que la comida empaquetada es de gran utilidad cuando no se tiene el tiempo para cocinar. Sólo que alimentarse únicamente con estos productos, a la larga, trae consecuencias. 

Los congelados son alimentos no frescos ni naturales, que no aportan al organismo esos nutrientes que el cuerpo necesita para mantenerse e, incluso, para combatir una que otra enfermedad. Además, para que se mantengan en buen estado por mucho tiempo, contienen grandes cantidades de sodio, mineral que en exceso daña a los riñones.

Azúcar. Está claro que el organismo necesita azúcar, en pequeñas cantidades, pero si se abusa de ella, sobretodo de las refinadas, se puede caer en la obesidad e incluso desata varias enfermedades, como la diabetes, problemas de corazón, insuficiencia renal, entre otras.

Cereales. Todos sabemos que una dieta balanceada, indudablemente, incluye cereales. Ten en cuenta que su consumo debe ser moderado, ya que no aportan muchas vitaminas y minerales y algunos de éstos, sobretodo los integrales, contienen fítatos, que no son fáciles de digerir y por lo tanto, crean sales y minerales que impiden la correcta absorción del calcio y el zinc. Además, los cereales contienen gluten, proteína que no todas las personas digieren con facilidad, lo que les ocasiona inflamación. También, tienen lectinas, otra proteína que, en ocasiones, se transforma en toxinas que pueden llegar a la sangre.

Grasas trans. Geosalud.com dice que las grasas trans o hidrogenadas son ácidos insaturados que se forman tras ser procesados los aceites vegetales, que se transforman en sólidos o líquidos. Pueden existir de manera natural en ciertos alimentos, y también los encontramos en todos los productos horneados, fritos y cocinados con margarina.

Sushi. Esta comida japonesa, generalmente, se basa en la ingesta de pescados y mariscos crudos. Y si bien son saludables, hay que tener cuidado, ya que en ocasiones se puede adquirir una infección seria. Los pescados crudos pueden portar bacterias y virus que podrían desencadenar en una enfermedad grave e incluso la muerte.

Fructosa. A esta sustancia se le suele llamar "el azúcar de las frutas" y generalmente se utiliza en las dietas para endulzar los alimentos. Aunque muchos doctores la recomiendan, lo cierto es que es el hígado el que la transforma y, por lo tanto, puede generar resistencia a la insulina, baja tolerancia a la glucosa, formación de triglicéridos altos e hipertensión.

Edulcorantes. Son aquellas sustancias, ya sean naturales o sintéticas, que se encargan de darle ese toque de dulzura a los alimentos. Uno de estos es la sacarina, la cual durante varios años fue acusada de ser una de las causas por las cuales una persona llega a desarrollar cáncer. Otro es el aspartamo, el cual lo encontramos frecuentemente en bebidas sin azúcar. Este se descompone primeramente en metanol e incluso, puede llegar a convertirse en formaldehído, que causa daños al sistema nervioso e inmunitario.

Olestra. Esta es una sustancia sintética, la cual es utilizada como un sustituto de grasas. Pareciera que es un alimento extraordinario, el cual está incluido en algunas papas fritas y otros snacks, ya que tiene buen sabor, no es grasoso, contiene vitaminas y reduce calorías. Sin embargo, está comprobado que éstas provocan trastornos digestivos, como esteatorrea, además de que invitan a no consumir frutas y verduras en esos momentos de antojo.

Jugos artificiales. Estas bebidas están hechas a base de grandes cantidades de azúcar y edulcorantes artificiales, los cuales contienen altos índices de cafeína, colorantes y otras sustancias artificiales. Si se toman en exceso, se sufrirá de sobrepeso y todas las enfermedades relacionadas con este problema de salud.

Nitratos. Son compuestos que se encuentran de manera natural en el medio ambiente, ya que derivan del ciclo del nitrógeno y en ocasiones, son utilizados en el proceso de algunos alimentos y como conservadores de ciertos productos derivados de la carne. Los embutidos, por lo regular, necesitan de los nitratos para conservar un color agradable y evitar que ciertos microorganismos se alojen en ellos. El problema radica en que éstos, en el interior del organismo humano, pueden transformarse en nitritos, mismos que producen nitrosaminas, un químico que puede generar cáncer, principalmente de esófago y estómago.

miércoles, 15 de mayo de 2013

El bolso de las mujeres tiene más bacterias que un retrete

Los bolsos femeninos son un contenedor ideal para gérmenes y bacterias, según un estudio realizado por una empresa británica, especializada en asuntos de limpieza. El análisis ha revelado que los más contaminados son los de piel, a causa de la textura, donde se acumulan todo tipo de agentes infecciosos.

La investigación realizada por la empresa Initial Washroom Hygiene reveló que la superficie de los bolsos, en general esponjosas y porosas, son un lugar ideal para que se instalen gérmenes de todo tipo.

En especial, los investigadores, recomiendan poner atención a los bolsos de piel.

Uno de cada cinco bolsos analizados resultó que podía ser peligroso para la salud de su propietaria, no solo por el objeto en cuestión, sino también por las cosas que contiene.

Estos también pueden acumular bacterias, como es el caso de los pintalabios, el rimel y las cremas, que ofrecen condiciones muy favorables para el desarrollo y crecimiento de gérmenes infecciosos.

"Los bolsos están en constante contacto con las manos y con toda clase de superficies por lo que las posibilidades de transferirles gérmenes es muy alta. Además de que no se limpian con demasiada frecuencia”, dijo Peter Barratt, director técnico de Initial Washroom Hygiene.

Una vez que los gérmenes se instalan en los bolsos, es muy fácil que se diseminen a través de las manos a otras superficies, por lo que este experto en higiene recomienda "lavarse frecuentemente las manos para remover las bacterias, y limpiar a fondo los bolsos periódicamente para prevenir que la contaminación se acumule”.